En una nueva audiencia del Juicio Unificado Campo de Mayo el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°1 de San Martín continuó con las declaraciones testimoniales. En esta oportunidad prestaron testimonio Walter Mesa Niella, Claudia Bellingieri y Tomás Civitarese.

En primer lugar el tribunal tomó declaración al sobreviviente Walter Mesa Niella, quien comenzó su testimonio dando cuenta de las circunstancias en las que fue secuestrado a los 24 años de edad junto a su familia el 25 de enero de 1978: “Mi viejo era militante peronista, de la organización Montoneros, era a él a quien buscaban, al no encontrarlo nos secuestran a nosotros”, explicó.

A continuación el testigo dio cuenta de las condiciones en las que permaneció secuestrado en Campo de Mayo: “Me llevan a un galpón donde había mucha gente, la verdad que era horrible, no se podía respirar, era todo quejidos, no sé como transmitirles lo terrorífico que fue eso”. Luego de permanecer secuestrado y ser sometido a distintos interrogatorios en los que le preguntaban por su padre, el testigo fue puesto en libertad: “Nos suben y nos dejan en una vía muerta de Palomar, yo creí que nos iban a fusilar, nos dejaron vendados, escuché la voz de mi cuñado, nos sacamos las vendas, yo creía que nos pegaban un tiro, hasta que sentí la mano de mi cuñado y empiezo a desartarme”, concluyó.

A continuación declaró Claudia Bellingieri, Directora del Programa Justicia por Crímenes de Lesa Humanidad de la Comisión Provincial por la Memoria. La testigo dio cuenta del trabajo que realiza  CPM y del funcionamiento de Dirección de Inteligencia de la Policía de la Provincia de Buenos Aires DIPBA hasta 1998. En su exposición Bellingieri  dio detalles sobre el funcionamiento del Batallón de Inteligencia 601, del CIIMM, la Zona de Defensa IV y exhibió legajos donde se registraba información sobre actividades gremiales y políticas.

Ante la pregunta de la querella del Dr. Llonto sobre el volumen del archivo la testigo explicó: “El archivo que encontramos fue realizado de manera legal, está sistematizado, no faltan expedientes, está ordenado. El 90 % de lo que se produjo está sistematizado, puede ser que haya cosas no elevadas, pero en su mayoría está integrado. Sobre lo que se produjo en la Dirección de Inteligencia, no decimos el 100 % pero tenemos el 90%, puede ser que se hayan robado una ficha pero no altera la integridad del fondo”.

Finalmente fue el turno de Tomás Civitarese, quien aportó información sobre Beatriz Oesterheld, secuestrada y asesinada por la última dictadura cívico-militar: “Trabajaba mucho, con las carretillas y escombros, hacían material para las veredas, ropa y remedios, una chica muy buena, en el barrio la queríamos todos porque ayudaba mucho”.

En relación a cómo se enteró del secuestro y asesinato el testigo explicó al tribunal: “Nos enteramos que la habían secuestrado, no sabíamos dónde ni nada, sabíamos que estaba desaparecida. Después supimos que apareció muerta en la puerta de un hotel, mi cuñado la vio, la reconoció y vino a avisar”

Las audiencias de este juicio se realizan todos los días miércoles ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°1 de San Martín en donde son juzgados 22 imputados por cometer crímenes de lesa humanidad contra 323 víctimas. La Subsecretaría de Derechos Humanos de la Provincia de Buenos Aires es querellante en este juicio.