La historia de un gaucho reclutado a la fuerza está en el origen de lo que se consideró, años más tarde, el poema nacional. En 1879, Hernández dará a conocer la segunda parte de este poema gauchesco: La vuelta de Martín Fierro.
Diálogo entre dos gauchos, Anastasio y don Laguna, donde se intercambian impresiones sobre la ópera Fausto, vista en el teatro Colón. Preciosa pieza humorística que mereció elogios de José Hernández, Jorge Luis Borges y Mujica Laínez, entre otros.
La obra fue estrenada en 1908 en el Teatro Moderno, con enorme éxito. Su trama tematiza los avatares de una familia que aparenta una condición social que no posee. En palabras de David Viñas: hay un “exterior al que se aspira, por consiguiente, el universo interior de la vergüenza y el secreto en el que se vive y padece”.
Para Alberdi, dice Alberto Palcos, los viajes fueron un modo de conocer el sentir europeo contemplado desde una mirada argentina y americanista. En ellos se forjan sus dos personalidades: la del literato y la del pensador.
Los doce relatos y lateoría del cosmos con la que el libro finaliza provocan sensacionesde asombro y fantasía semejante a las que, en 1906, tuvo entre susprimeros lectores. En estas páginas conviven el discurso científicocon la irracionalidad y la tradición romántica con el misticismo.
El hijo de una pareja deinmigrantes italianos protagoniza esta novela que no carece desordidez y un sesgo ideológico que rompe con la tradiciónromántica. Fue publicada originalmente por entregas en el periódicoSud-América en 1887.
El autor de este librofue ayudante de campo del general Urquiza, aunque terminó siendo suenemigo. Este libro, aparecido en 1853, testimonia algunas escenas yepisodios de aquella experiencia. El título terminó convirtiéndoseen el apodo de su autor.
Los poemas de Alfonsina son considerados por algunos críticos como una expresión literaria que ha permitido el desarrollo del feminismo en Argentina. En esta selección aparecen indicios de esa hipótesis.
Este libro fue escrito en Caracas, donde su autor desempeñaba un cargo diplomático. Allí traza, con rasgos autobiográficos, las andanzas de un grupo de jóvenes en el Colegio Nacional, de Buenos Aires. Fue publicado por primera vez en 1884.
El narrador de esta novela es un adolescente que aprende gracias a su padrino, Don Segundo, el oficio de resero y la vida rural. Esta novela fue leída como construcción del arquetipo de la vida criolla.
La selva misionera es el hábitat donde el escritor uruguayo situó los distintos cuentos protagonizados por animales que componen este libro. Quiroga pensó estos relatos para sus propios hijos. Desde entonces miles de niños disfrutaron de estas historias reunidas en 1918.
Esta fundamental novela, publicada en 1929, es una lúcida crítica social. Narra una conspiración, pero también la humillación, la venganza, la soledad y el sinsentido de la vida.
Su poesía abreva en lo profético y lo social. Fue leído y recitado por generaciones enteras. Aún hoy, algunos de sus versos siguen siendo los más reconocidos de la poesía argentina.