En el día internacional de acción por la salud de las mujeres, recordamos que nuestra salud sexual y reproductiva es un derecho fundamental que debe garantizarse aún en tiempos de aislamiento social preventivo obligatorio.
Las conquistas de la autonomía y dignidad sobre nuestros cuerpos se mantienen siempre. El acceso a anticonceptivos gratuitos y de nuestra elección, la interrupción legal del embarazo y el parto respetado están garantizados en tiempos de pandemia. Nuestros derechos no se posponen y son esenciales.
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