Con este equipo en funcionamiento, los pacientes ya no tienen que ser derivados a otros centros de salud.
El angiógrafo del hospital público Presidente Perón, de Avellaneda, no funcionaba desde hace dos años. Hoy los vecinos y vecinas de la región cuentan con el servicio esencial de esta aparatología que puede salvar vidas, ya que permite obtener imágenes del sistema vascular en tiempo real.
Con este equipo en funcionamiento, los pacientes ya no tienen que ser derivados a otros centros de salud para hacerse los estudios correspondientes. “Realizamos angiografías diagnosticas, en donde observamos en imágenes el interior de las arterias y venas. También permite realizar procedimientos terapéuticos para corregir obstrucciones a nivel endovascular“, explica el angiografìsta Marcelo Cetera.
El angiógrafo es apto para estudios cardíacos y vasculares que permite realizar un diagnóstico y tratamiento oportuno cuando el equipo médico sospecha que un paciente tiene lesiones en venas o arterias.
Los trabajadores y trabajadoras advirtieron en el transcurso de estos dos años, en más de una oportunidad al Ministerio de Salud de la Provincia sobre la faltante de esta aparatología esencial, que dificultaba el normal funcionamiento del hospital, pero nunca los escucharon.
El hospital provincial Presidente Perón de Avellaneda es de alta complejidad y también se destaca como centro neuroquirúrgico, con guardia las 24 horas; y servicios complejos como cirugía cardiovascular de adultos; ortopedia y urología.