La ministra de las Mujeres Políticas de Género y Diversidad Sexual Estela Díaz participó de la presentación del libro “Mujeres que hacen barcos: la historia de trabajo y lucha de las mujeres del Astillero Río Santiago” junto al presidente del Astillero Pedro Wasiejko y trabajadoras y autoras del texto. 

“El libro recupera el momento fundacional. Se inscribe en una época, en el segundo gobierno de Perón, en el que se impulsaba la Justicia Social. Justicia Social que ahora es indisoluble de la igualdad de género” señaló Estela Díaz, quien realizó el prólogo del libro. “Trabajamos para construir autonomía e igualdad en el conjunto de las relaciones sociales que favorecen una vida libre de discriminaciones y violencias hacia las mujeres y las diversidades” continuó la Ministra.

“Este libro, es el reconocimiento de sus luchas y tareas, es un jalón más en el camino que pone en duda ese modelo cultural patriarcal. Hay que promover que las empresas, tanto públicas como privadas, se comprometan a desarrollar acciones concretas y afirmativas para promover la inclusión”.  En ese sentido, destacó las campañas “Oficios sin prejuicios” y el “Sello Construir igualdad” que, junto a los Ministerios de Trabajo y de  Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica, “tienen como objetivo favorecer el acceso de las Mujeres y LGTBI+ a las actividades productivas donde no están, promover sus ascensos, sus permanencias, sus capacitaciones y democratizar las tareas de cuidado. Es fundamental para avanzar en la erradicación de las violencias. Es estratégico en el camino derrumbar todas las brechas de desigualdad en el mundo laboral” concluyó.

El presidente Pablo Wasiejko señaló la importancia del libro para el Astillero: “Es sumamente importante este trabajo de recopilación de experiencias realizado por las compañeras, impulsado en la gestión de Ariel Basteiro y acompañado con mucha decisión por el sindicato ATE Ensenada. Las transformaciones y cambios son posibles y es más fácil realizarlas cuando hay un periodo de crecimiento de la actividad, si se toman las decisiones adecuadas, este proceso puede hacerse pensando en clave de género, de inclusión, y la enseñanza que nos dejan los testimonios del libro nos condiciona y nos obliga a encararlo de esa manera”. Tras reconocer el acompañamiento de Estela Díaz y del Ministerio señaló que: “El compromiso mío es totalmente claro, al igual que en el resto de la estructura. El Astillero está nuevamente en marcha y con una visión inclusiva”.

La coordinadora de Recursos Humanos del Astillero, y quien compiló el libro, Beatriz Horrac, destacó los 68 años de trabajo y de lucha del Astillero y señaló al libro como un “espacio para reconstruir las historias de las mujeres trabajadoras desde la voz de sus protagonistas”.

El texto recopila recuerdos, anécdotas y cuenta como fue la inclusión paulatina de mujeres en el sector. Fue  elaborado por trabajadoras de distintos sectores del Astillero, delegadas gremiales, delegadas de género de ATE Ensenada y fue entregado a las trabajadoras y a las estudiantes  de la escuela técnica que funciona en la planta. “El libro pretende llevar a dialogar lo hecho por las mujeres del Astillero con otras mujeres que quieran conocer nuestra historia” concluyó Beatriz Horrac.

Durante la presentación, la trabajadora delegada Carolina Antognini recordó que el Astillero es “una fábrica que fue construida por hombres y para hombres, con muy pocas mujeres trabajando y sólo en tareas administrativas. Somos la fábrica con más compañeras y compañeros desaparecidos y asesinados durante la dictadura”.  

Entre las historias relatadas, destacó la historia de Matilde Itzigsohn, que encabezó la lucha por el Convenio Colectivo de Trabajo y la pelea por la apertura del jardín maternal, que finalmente pudo concretarse en el 2013 y lleva su nombre. La directora provincial de Planificación y Gestión Comunicacional Lucía García Itzigsohn, hija de Matilde Itzigsohn agradeció el recuerdo: “Es muy conmovedor para mi escucharlas hablar de mi mamá y verlas ocupando espacios. Es una gran victoria y celebro con ustedes”.

La delegada del Astillero Carolina Antognini dio cuenta de los pocos espacios que las mujeres ocupan, que son esencialmente de servicio o administrativos. Sin embargo, señaló que con la apertura del jardín, el comedor y la escuela técnica mixta, estos lugares están en aumento. “Las mujeres somos el 10 %, pero sólo 20 mujeres se sostienen en trabajos ligados a la producción”.

Por su parte,  la trabajadora Cecilia Sol Álvarez coincidió con su compañera en el reclamo por “un mayor acceso de compañeras a puestos jerárquicos, de toma de decisión. La distribución en la fábrica es desigual, tenemos que poder facilitar que más compañeras formen parte de las aéreas productivas de la fábrica, para lo que se necesita una reforma edilicia para que el Astillero sea una fábrica integradora e inclusiva”.

La trabajadora delegada de la comisión directiva de ATE Ensenada Lorena Benaglia celebró el trabajo llevado adelante por el gremio y por la empresa: ”El libro es un símbolo de lucha para visibilizar la problemática de las compañeras. Que sea el puntapié para continuar luchando por los derechos de todas las compañeras” y señaló: “Hay un contingente de mujeres que ya no se calla, que es protagonista en las luchas y debates, y que no va a parar hasta lograr el astillero que queremos”.

La moderación estuvo a cargo de la directora de Políticas de Equidad, Formación Laboral y Políticas de Cuidado Claudia Lazzaro.

Participaron de la presentación, la senadora provincial María Reigada, la asesora en Géneros y Oficios del Instituto Provincial de Formación Laboral, Lucía Blotta, responsables de los equipos de conducción y centros de formación laboral de la provincia de Buenos Aires, representantes de SOEME.