Luego del receso invernal el Tribunal Oral Federal N°6 de la Ciudad de Buenos Aires retomó las audiencias del juicio de lesa humanidad en el que la Subsecretaría es querellante.
Este viernes 9 de agosto, el Tribunal El Tribunal Oral Federal N°6 de la Ciudad de Buenos Aires compuesto por los jueces Daniel Horacio Obligado e Ignacio Carlos Fornari y la jueza Sabrina Namer, continuó con el juicio que aborda los crímenes perpetrados entre 1974 y 1977 donde se juzga a tres ex miembros de la División Cuatrerismo de la Bonaerense y dos oficiales del Batallón de Inteligencia 601.
Antes de la feria judicial se había concluido con los alegatos de las querellas y los alegatos de las defensas.
De este modo, estamos arribando a las instancias finales de la parte III de este juicio ya que ahora se llevaron a cabo las réplicas y dúplicas, es decir, las instancias en que las partes podían responderse puntos que consideraran habían aparecido como nuevas o desconocidas en los alegatos y por lo tanto entendían que no habían el momento para sentar sus posiciones.
Si bien con respecto a esta etapa, al comienzo el Tribunal expresó que no advertía dichas circunstancias, sí consideró que había algunas cuestiones o planteos que las partes deberían dilucidar, como por ejemplo “aspectos de la constitucionalidad”, dijo el juez Daniel Obligado haciendo referencia a lo expuesto por las defensas de los represores sobre la inconstitucionalidad de la ley 25.779 que declaró la nulidad de las leyes 23942 de Punto Final y la ley 23521 de Obediencia Debida.
Así, los fiscales auxiliares Esteban Bendersky y Viviana Sánchez, agregaron entre los puntos a abordar o aclarar por parte de las defensas de los represores: el cuestionamiento de la validez de la incorporación de determinada prueba de cargo; la invalidez de una especie de ciertos testimonios en particular, en alusión a los cuestionamientos sobre la validez de los testimonios de personas que habían declarado ahora como mayores pero que al momento de los hechos eran menores; la aplicación de fallo de la Corte Suprema “Magallanes”, que es un fallo que no estaba al momento del alegato presentado por ellos y que introduce la defensa, y que ellos querían argumentar por qué no sería aplicable este fallo, y dudas sobre la aplicación o no del fallo Ullúa, entre otras.
A su vez, al abogado querellante Pablo Llonto expresó en modo de pregunta a los defensores, entre ellos Horacio Romero Villanueva y Nadia Komarofky como defensas de Minod, y los defensores públicos Gritzco Gadea Dorronsoro y María José Turano: “¿Cuántas sentencias creen ustedes que les harán falta para que entiendan que la llamada lucha contra la subversión fue ilegal? ¿Cuántas sentencias en la Argentina esperan ustedes? Porque hasta el momento en estos 41 años casi de democracia, desde 1985 en adelante, el juicio a las juntas tenemos 326 sentencias de tribunales de todo el país, de norte a sur de este a oeste, que han dicho claramente que aquí no hubo una guerra, que aquí hubo un plan de Exterminio, que los hechos que se declararon nulas las leyes de impunidad, y que además las sentencias han dicho no solo que estas leyes son válidas, las que declararon la nulidad de las leyes de impunidad, sino que en la Argentina y en el resto del mundo el criterio universal es que no se deben poner obstáculos para el juzgamiento de los crímenes más aberrantes, se llamen como se llamen los obstáculos. Se llamen indultos, amnistías, leyes de impunidad, planteos de prescripción, todos esos obstáculos nuestros tribunales han sido determinantes en este punto. Y esto lo decimos porque a veces pecamos por ahí de ilusionarnos de algo, nos ilusionamos por ejemplo con pensar que va a llegar algún día en el que ninguna defensa haga el planteo de rescatar a las vergonzosas leyes, no para la Argentina, vergonzosas leyes para la humanidad como fue por ejemplo la ley que consagró la Obediencia Debida en el país. Una ley vergonzosa porque fue arrancada a punta de bayonetas y de tanques, que fue arrancada por los golpistas y que ya fue declarada nula. Esa ley que da vergüenza no puede estar más en boca de los defensores. Por supuesto que tienen el derecho a plantearlo, como también nosotros tenemos el derecho a decirles que son leyes vergonzosas y que ojalá llegue algún día en la Argentina el juicio en el que nunca más los defensores se agarren de estas leyes para hacer el planteo se perdón”.
La próxima audiencia quedó programada para este viernes 27 de septiembre a las 9.30 hs donde se expondrán las últimas palabras y luego el veredicto.