Buenas tardes a todos y a todas.
Primero, quiero agradecerle al intendente Arturo Rojas [Arturo Rojas, intendente de Necochea] por recibirnos, a toda la dirigencia local, a los intendentes también de la región, de la zona, de otras localidades turísticas. Agradecerle también, que no lo había hecho, a Chelo [Marcelo Rivero, excandidato a intendente de Necochea], compañero del PJ local. Y decirles que hoy tuvimos una jornada intensa, prolongada, como recién comentaba Nicolás Kreplak [Ministro de Salud de la Provincia de Buenos Aires], nuestro ministro, el intendente, Augusto Costa [Ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica de la Provincia de Buenos Aires], nos dedicamos a varias cosas que quiero reseñar rápidamente.
En primer lugar, entregamos una ambulancia de máxima complejidad para Balcarce, para una localidad que la necesita. Quiero recordar, para aquellos que piensan que el mercado soluciona todo, ahí tienen un buen ejemplo: no, no es así. Sí, el Estado provincial. Me complace decir hoy que nunca en la historia de la Provincia se alcanzó esta cantidad de ambulancias distribuídas, 313 de alta complejidad en la provincia de Buenos Aires. Es un aporte muy grande al sistema de emergencias.
Y esto ocurrió mientras estábamos inaugurando lo que recién comentaba el ministro Kreplak, que son esas casas asistidas, que es una política que nos hemos dado desde el comienzo de la gestión con el área de Salud Mental, con el Ministerio de Salud, para llevar adelante algo que es simplemente aplicar una ley, una ley que está vigente, que es la ley de salud mental, que manda a cerrar los manicomios.
¿Por qué cerrar los manicomios? Porque es una institución que con el paso del tiempo —hoy lo estuvimos haciendo en una manicomio que tiene 100 años— en la que puede comprenderse que el manejo de estos padecimientos de los enfoques, de los encuadres ha cambiado, las terapias han cambiado. Así que es una institución que no solo está cuestionada a nivel mundial y fuera de época, sino que cuando uno observa las situaciones que se dan al interior de estas internaciones crónicas, la verdad es que no puede tener ninguna duda.
Se viven situaciones de abandono. Y no porque la Provincia, sobre todo los trabajadores y trabajadoras del sistema de salud, en todas las circunstancias no hayan hecho un esfuerzo inmenso, una verdadera militancia para acompañarlos, sino porque son situaciones que redundan finalmente en una suerte de privación de la libertad por falta de alternativa, donde sin ninguna condena, sin haber cometido ningún delito, simplemente por cuestiones de salud mental, terminan internados, a veces faltan familias, faltan ingresos, faltan posibilidades y quedan ahí.
Hoy estuvimos visitando estas casas asistidas, que es la política que nos hemos dado, donde había algunos que ahora están viviendo allí que llevan 31 años, una señora llevaba 31 años internada y probablemente iba a terminar sus días. Para los que no comprenden esta política, sobre todo en el Gobierno Nacional que intentó en la Ley Ómnibus terminarla, después tuvo que retirarlo porque la Organización Mundial de la Salud le puso un límite a algo que realmente es desquiciado, que es tratar de evitar que se mejore el bienestar, la respuesta, el acompañamiento y casi diría la dignidad y las condiciones de vida de quienes están en esta situación de internación y abandono.
Así que hoy estuvimos visitando 2 de esas casas, y en esas casas, basta ir un ratito, los invito a venir a verlo para el que dude si hay que cerrar o no los manicomios, a ver cómo se vive en estas instituciones y qué cambio se da con esta política que ya lleva 185 viviendas para alojar, acompañar, asistir a veces, como en este caso, 24 horas por día. No es que se puedan valer por sí mismos, pero de esta manera recobran una calidad de vida que no tenían y que tiene que ver con la salud por supuesto, tiene que ver con los derechos humanos. Así que importantísimo esto y un día histórico porque nosotros contamos con 4 instituciones en la provincia de Buenos Aires, con estas casas asistidas, terminamos hoy de concluir un proceso que cierra uno de los manicomios de la provincia de Buenos Aires, el primero, así que, muy felices de poder haberlo hecho.
Luego estuvimos junto con los intendentes de la región, junto con el intendente de Necochea, en una reunión como hacemos en todas estas conferencias de verano. Esta es la última conferencia de verano, la cuarta. Estuvimos sosteniendo una reunión con diferentes sectores de la cultura, de la producción, del trabajo, con emprendedores, con cooperativas, con empresarios, de diferente magnitud. Lo quiero decir porque también a veces no se termina de ver la profundidad del proceso que estamos atravesando. Escuchamos 15 testimonios, quien quiso hablar lo pudo hacer y describieron una situación desoladora. Fijense, porque también hay mucha discusión acerca de qué pasaba, responsabilidad de quién, cómo veníamos. Veníamos de tener una temporada récord tras otra. Íbamos a las reuniones donde nos marcaban lo que faltaba, lo que se había hecho, pero siempre batiendo récords de estadía, de venta, de ocupación, de asistencia de turismo, en cada uno de los destinos de la provincia de Buenos Aires.
Lo único que cambió desde la temporada pasada a esta es la política económica y la política en general del Gobierno Nacional. Diría un cantante “no culpes a la lluvia, no culpes a la playa”. Fue Milei el que destruyó la temporada, fue Milei y sus políticas el que destruyó la temporada y terminamos esta semana con 18 por ciento de caída en la afluencia turística. Decíamos que era una temporada difícil de medir, porque a veces la cantidad de visitantes en provincia de Buenos Aires varía también a veces por sustitución de otros destinos, son muchos factores. La cantidad de visitantes se mantenía más o menos estable con respecto a la temporada anterior, pero todos los demás indicadores —como contaba el ministro recién— venían deteriorándose, venía cayendo la estadía, o sea, la cantidad de días que pasan quienes vienen a visitarnos. Venía cayendo también y principalmente el consumo, que medido por cualquier indicador, venía mostrando y exhibiendo caídas del 25 por ciento, 30 por ciento, y ahora se profundizó a casi el 40 por ciento.
Así que ha sido una temporada que empezó mal y terminó peor, que además muestra de esta manera cómo se va profundizando el efecto de la políticas económicas y la ausencia del Estado Nacional, esto de que el Estado Nacional se borra, se corre, deserta de funciones básicas y obligaciones que tiene. No es que por tener determinada ideología o por haber ganado una elección entonces el Estado Nacional puede no ocuparse de nada, no ocuparse de la salud, de la educación, del trabajo, de la producción, no darle una mano a nadie. Lo hemos visto y ahora lo voy a decir porque me parece que fue bastante premonitorio de lo que iba a ocurrir.
Cuando estuvimos en Bahía Blanca, y lo digo sin ensañarse ni apasionarme, después de un temporal tremendo, vino el Gobierno nacional, vino también el Presidente y nos dijo “yo espero que se puedan arreglar con lo que tienen”. Eso también expresa un poco lo que estamos observando hoy. La Provincia de Buenos Aires está haciendo enormes esfuerzos para sostener y para asistir a todos los sectores que están sufriendo con esta situación, y de esta manera vemos que se incumplen obligaciones y responsabilidades. No es simplemente que, bueno, ya lo dijo “vamos a fundir a las provincias, o vamos a dejarlas sin un peso”, como si fuera una especie de batalla o juego de ver quién gana algo. No es así. A nosotros nos falta y nos ha faltado el Previaje, hoy me lo pedían. Nos ha faltado la asistencia de todo tipo del Gobierno Nacional y también la desregulación absoluta de precios, tanto en alimentos, pero en medicamentos, de combustible, todo esto redundado en que la temporada sea realmente, al final una temporada mala, muy mala y que además genera miedo porque de persistir estas políticas, no se pueden esperar tampoco otros resultados.
También ha sido una temporada, que si me permiten una pequeña reflexión, ejemplificando, donde sus características exhiben un poco el país que es resultado de estas decisiones. Fue una temporada, lo decía recién Augusto, fragmentada, dual. El resultado negativo no fue igual para todos, en los destinos de vacaciones, incluso en los establecimientos, en los hoteles de, para mayor poder adquisitivo, algunos dicen premium, tanto destinos, como establecimientos, ya sea hotelero, gastronómico, ahí no se notó tanto la caída, se notó pero levemente y se sostuvo.
Ahora, el desastre ocurrió en los destinos populares, para los sectores medios, para los sectores trabajadores, el turismo familiar, el turismo interno, todo lo que caracteriza a la provincia de Buenos Aires como principal destino turístico de la Argentina. Ahí, aún en el mismo municipio, aquellas playas, aquellas localidades de mayor poder adquisitivo, se mantuvieron más o menos y las que son más populares sufrieron una caída estrepitosa.
Entonces es eso lo que hacen estas políticas de ausencia, abandono, a la que algunos insisten con llamar libertad, pero es abandono, y es que el que no puede, no tiene los medios, se arregle como pueda. Tiene libertad de no irse de vacaciones, libertad de pagar precios exorbitantes, todas libertades que realmente se están ejercitando de una manera deliberada, pero el resultado es que a unos les va muy bien, o por lo menos sostienen y otros quedan al costado del camino. Esto es lo que ha pasado en esta temporada y se puede ver en las estadísticas, en los números, destino por destino.
Hoy en la reunión con los sectores de la producción escuchamos también casos concretos, por eso son reuniones muy extensas donde puede hablar cada uno de los representantes de los sectores. Nos contaban en una fábrica de chocolates que hace poquito había abierto, acá en Quequén, en esta hermosa playa bonaerense con poco sentido de la oportunidad, porque abrió el local y después se precipitaron las situaciones macroeconómicas, las decisiones del Gobierno actual. La dueña contaba que después de 30 años, si no me equivoco, teniendo 4 locales que estaban en expansión y viniendo de récord de aumento, cambió la tendencia y ahora comentaba que una de sus socias estaba pensando en que tal vez había que cerrar. Trunca vidas esto, trunca destinos, trunca futuros, la verdad es que lo que hemos observado en cada uno de los que les tocó hablar es que la situación es a veces desesperante.
La Provincia de Buenos Aires como siempre comprometida con su pueblo. ¿Qué es eso?, ¿Qué es gobernar? Que si alguien necesita una mano, que si hay una empresa que tiene dificultades, que si hay establecimientos culturales, artistas, con problemas, hay que acompañar, ayudar, contribuir en todo lo que se pueda. La indiferencia, la insensibilidad a veces parece inhumana. Y no es tan difícil ni tan caro tampoco, lo que pasa es que hay que recorrer, hay que estar, hay que observar, hay que sentir y hay que trabajar. Si tengo que decir algo, eso es lo que le pedimos al Gobierno nacional, que trabaje por cada uno de los y las bonaerenses. No se trata de andar dando lecciones de doctrinas económicas, sino de ayudar al que lo necesita de todas las maneras posibles y eso es lo que nos está faltando como provincia y a todas las provincias argentinas.
Hace poquitos días observamos de nuevo un recorte de fondos que no son discrecionales, son recortes ilegales. Hablábamos ayer con varios gobernadores, esto está ocurriendo en todas las provincias. Es un solo criterio, que es recortar fondos pensando que se le hace daño a un gobernador, a un gobierno, o a un dirigente político. Por ejemplo, si cortan el fondo de seguridad… Nosotros veníamos de reemplazar todos los patrulleros. Es más, cuando llegamos —para que quede claro— había 900 patrulleros en 2019 en la provincia de Buenos Aires destruidos, depósito de chatarra, porque habían desinvertido. 30 por ciento habían caído los sueldos de los trabajadores y trabajadores de la Policía de la Provincia de Buenos Aires. 30 por ciento en la época de Vidal y de Macri. Nosotros nos propusimos recuperar y reconstruir también en términos de tecnología, de equipamiento, de formación, y eso requiere inversión.
El Fondo de Fortalecimiento para la Provincia de Buenos Aires tenía que ver, y se ha rendido cada año, con inversiones que nos hicieron pasar de 900 patrulleros destruidos, realmente en un estado calamitoso, a la compra de más de 5.200 patrulleros en la provincia de Buenos Aires. Reemplazamos todos los patrulleros por patrulleros 0 kilómetro. Así que no es ni para la casta, ni una caja, ni para la política: es para el pueblo de la provincia de Buenos Aires. Así como el Fondo de Incentivo Docente era un refuerzo del sueldo de maestros y maestras, así como el Fondo Compensador para el Transporte del interior de Argentina y de la provincia era el boleto de colectivo de la gente. Así que dejen de mentir, dejen de versear, y dense cuenta que están haciendo mucho daño con estas políticas.
A nosotros hoy nos preguntaban, cada uno de los oradores nos planteaban situaciones, porque para eso venimos, qué es lo que vieron, a veces felicitándonos, a veces acompañando, a veces pidiendo la continuidad de determinadas políticas, pero también marcando, sugiriendo, criticando. Y está muy bien, para eso venimos. Hay que animarse también a escuchar a todo el mundo, darle el micrófono.
Sabemos que falta mucho. Pero todos los que hablaron nos pedían que continúe la Cuenta DNI, que continúe el PreViaje, que continúen los viajes de egresados para pibes y pibas que alguno entendió mal y pensó que era una especie de regalo gracioso a cambio de algo: recorran también, pregunten, escuchen, aprendan. Era un estímulo a cada uno de los pueblos de turismo de la provincia de Buenos Aires para que en temporada baja tuvieran afluencia turística, actividad y trabajo. De eso se trataba y eso nos pidieron uno por uno quienes les tocó hablar, que las ventas, que la ocupación hotelera, que cada uno de los factores que hacen a la vida real, concreta, de la gente, de la población que vive en municipios y provincia.
No vive en una entelequia, no vive en una teoría austriaca. Vive en municipios y provincias que necesitan más salud, más educación, más seguridad. Así que escuchamos que nos pedían mejoramientos cloacales en diferentes rutas. Son obras que hay que hacer. Suspendieron toda la obra nacional, nos pedían que las tomara la provincia de Buenos Aires porque son privaciones después. Creo que básicamente llegamos a un acuerdo aquí, en esta reunión. No todos necesariamente —y me lo han dicho después— nos votaron, nos acompañaron o comulgan con nuestras ideas; pero nos dijeron con claridad que los problemas que tenemos no se solucionan sin Estado o con menos Estado, sino con un Estado presente que acompañe, que ayude, que colabore, que cree trabajo, que dé oportunidades, que genere mayor justicia social.
Muchas gracias.