Fue recibido por la directora provincial del área, Nora Etchenique, con quien recorrió las instalaciones y saludó a los trabajadores.
El ministro de Salud de la Provincia de Buenos Aires, Daniel Gollan, visitó hoy el Instituto Provincial de Hemoterapia donde dialogó con los trabajadores y la directora, Nora Etchenique, sobre el estado de situación actual y los proyectos que comenzarán a ejecutar. El objetivo es incrementar la cantidad de donantes generosos y habituales y los productos derivados de la sangre para garantizar este insumo vital e indispensable para salvar vidas en el sistema de salud bonaerense.
Al cierre de la visita, Gollan destacó que “la impresión que me llevo es que acá hay un recurso humano extraordinario y la sensación es que durante cuatro años se perdió tiempo que tenemos que recuperar”. En ese sentido, la directora provincial, Nora Etchenique, señaló que en los últimos años subió del 45 al 70 por ciento la cantidad de donantes “de reposición”, es decir, aquellos que solo donan porque tienen un familiar o un amigo que lo requiere, todo lo contrario al perfil deseable de donante, que es aquel o aquella donante habitual, generoso/a y responsable, que garantice la mejor calidad de los hemocomponentes.
“La sociedad tiene que entender que la mayoría de nosotros y de nuestros familiares vamos a necesitar sangre en algún momento de la vida. Entonces hay una cuestión de solidaridad, de compromiso y conciencia que vamos a fomentar con políticas activas, como las campañas de concientización. El desafío es ése y estoy convencido que con el recurso humano que tenemos vamos a tener éxito”.
Etchenique, que ya ocupó el cargo de directora provincial de Hemoterapia entre los años 2003 y 2016, agregó que el actual Instituto, emplazado en la esquina de 15 y 66, se mudará a un edificio nuevo que ocupa parte del predio del hospital provincial San Juan de Dios de La Plata. Por otra parte, explicó que las zonas oeste y norte de la Provincia serán abastecidas con el centro de Hemoterapia que funciona en el partido de Tres de Febrero.
“Como siempre dijimos, lo óptimo es tener dos o tres grandes centros productores de hemocomponentes y varias unidades de transfusión, lo que permitirá unificar la calidad de la sangre que se utiliza para transfusiones y terapias en los establecimientos de salud de la Provincia de Buenos Aires”, concluyó Etchenique.
