Se implementa a partir de la firma de un convenio con los municipios que soliciten adherirse al Plan
y queda a cargo del equipo de trabajo del Instituto el proceso:
Mensura, confección y aprobación de planos de división y registración parcelaria de los Barrios a
regularizar.
Relevamiento ocupacional para establecer los adjudicatarios.
Análisis para determinar si cumplen con los requisitos establecidos por la normativa vigente y
verificar que no cuenten con otra vivienda otorgada por el Estado.
Publicación de los edictos para transparentar la gestión escrituraria y dar la posibilidad a los
ciudadanos de oponerse con causa justificada.
Cumplida esta etapa, que le da transparencia al proceso escriturario, se confeccionan las minutas
contables para la constitución de las respectivas hipotecas en los casos que correspondan, y se
dicta la resolución autorizando a Escribanía General de Gobierno a confeccionar las escrituras
traslativas de dominio.
Tras ello, los adjudicatarios firman sus títulos de propiedad y se convierten en propietarios de sus
hogares.