Se trata de trabajos previstos en el Plan Manejo Integral de la Cuenca, Etapa I, financiados por el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF).
Las tareas se iniciaron a principios del mes de abril de este año, para el tramo, en la localidad de Pilar, abarcando la extensión comprendida entre las vías del FFCC Belgrano Norte y la Ruta Provincial Nº 6.
Nota: La documentación técnica del proyecto, los Estudios de Impacto Ambiental y Social, las Declaraciones de Impacto Ambiental, Indicadores de Relevamientos de Agua y Sedimentos e Informes sobre Patrimonio Arqueológico, Paleontológico y Forestal, pueden consultarse en el siguiente enlace: Adecuación Tramo Medio Río Luján.
La intervención total se desarrollará en Pilar Exaltación de la Cruz y Luján, en cuatro tramos que incluyen y exceden al tramo del cauce del Río Luján al que nos referimos y consta del saneamiento de 25.000 metros de longitud sobre el cauce. De este modo, se incrementará la capacidad de evacuación de grandes caudales, producto de los excedentes pluviales. Estos trabajos implicarán aproximadamente 5 millones de metros cúbicos de movimiento de suelos y se complementarán con la canalización de otros dos tramos de similares características, también próximos a licitar junto a sus obras complementarias.
Estas acciones generarán no sólo la mitigación de las inundaciones, sino que a partir de su implementación generarán un importante aporte económico, directo e indirecto, para la región; a partir del empleo de mano de obra y todo el movimiento acorde a una obra de tal envergadura.
Impacto Ambiental
Es importante destacar que para esta obra se ha incorporado la noción ambiental, definiendo su extensión de acuerdo con el precepto de minimizar la exposición de la sociedad a los eventos de inundación y permitir mantener los pulsos de crecida, que sustenten los ecosistemas de humedales y la diversidad biológica imperante en su valle de inundación. La intervención se rige por los parámetros especificados en los Estudios de Impacto Ambiental (EIAS) y su correspondiente Plan De Gestión Ambiental y Social (PGAyS).
De este modo, las acciones tanto estructurales, como no estructurales se articularán de forma tal que propicien un equilibrio entre las medidas de gestión de inundaciones y el menor perjuicio del sistema ambiental natural.
La aplicación más acabada de esta medida se plasma en la NO ampliación del cauce natural aguas abajo del FFCC. Belgrano Norte, lo que proporcionará el mantenimiento de las condiciones naturales que le dan sustento a los humedales y favorecen la continuidad natural de las áreas de protección. De esta manera, aún si la supresión completa del evento de inundación fuera posible en el plano técnico, no sería una medida sustentable, por cuanto la gestión del riesgo debe realizarse a través del control adecuado del evento y de la minimización de la vulnerabilidad de la población que se ve afectada.
Para dar mayor claridad al hecho que la inundación tiene aspectos perjudiciales pero también beneficiosos, los estudios previos incluyen, como parte del diagnóstico ambiental, un análisis de sensibilidad en el cual se consideran las áreas que podrían verse influidas tanto negativa como positivamente por los eventos de inundación
Las obras se implementarán de manera tal que se minimicen los efectos que estas procuren en su etapa de construcción y operación en el ambiente y es allí donde toman valor medidas estructurales de carácter ambiental, como la gestión de basurales existentes, de residuos en los sitios de obra; de la vegetación que se extraiga el manejo de las excavaciones, contemplando potenciales contaminaciones del río y evitando la afectación en términos de calidad del cuerpo de agua y la implementación de planes de reforestación como medidas compensatorias.
Estas acciones colaboran con la disminución de la vulnerabilidad de la población y permitirán que el río siga funcionando por pulsos, manteniendo así la condición que le da la sustentabilidad a los ecosistemas que se han desarrollado históricamente en su entorno. En la definición de corredores biológicos, se ha incorporado en el diseño de las obras el principio de mantenimiento de las condiciones actuales de inundabilidad de las áreas a ser destinadas como humedales. Considerando que las modificaciones en el escurrimiento de la cuenca afectan los ecosistemas de humedales, predominantes especialmente en la cuenca baja, se ha adoptado como criterio no intervenir este sector con acciones de canalización.
Por otra parte a partir de la definición de la línea de ribera y la restricción de usos en ella, se facilitará la conservación de un corredor biológico que favorecerá el desarrollo de las áreas de humedales aguas abajo. En resumen: se consideró no tocar el cauce principal, ni profundizar el fondo, lo que permitirá asegurar el mantenimiento del escurrimiento en estiaje y no afectar posibles pasivos ambientales que hubiere en el lecho. La Reserva Municipal de Pilar no se verá afectada por las adecuaciones, ya que la obra se desarrolla sobre la margen opuesta.
En atención a la normativa provincial vigente, el Estudio de Impacto Ambiental y Social (EIAS) de la obra, fue evaluado el Organismo Provincial para el Desarrollo Sustentable (OPDS), quien otorgo la correspondiente Declaración de Impacto Ambiental (DIA) por Resolución Nº 350/20.
En la misma, la autoridad provincial estableció como condicionante la ampliación de la EIAs mediante una actualización de la línea de base, con especial detalle en los aspectos constructivos de la obra. Por ello, se procedió a la ejecución de una serie de estudios que incluyeron monitoreo de los principales componentes ambientales y patrimoniales, ejecutándose monitoreos de calidad de agua, de calidad de sedimentos, de recursos forestales y vegetación y patrimonial arqueológico y paleontológico.
Monitoreos de calidad de agua y sedimentos
A través del Programa de Monitoreo, se controlaron todas las variables y parámetros de los indicadores de la calidad del agua superficial y sedimentos, cuya toma de muestras, estuvieron a cargo de Laboratorio Científico Moreno y Laboratorio CIC, para los análisis cromatográficos. Ambos laboratorios se encuentran habilitados por la autoridad ambiental de la Provincia de Buenos Aires, OPDS y los procedimientos se realizaron siguiendo los protocolos y con cadenas de custodia, según lo estipulado por la normativa provincial.
Los resultados obtenidos, tanto para la calidad del agua, como para los sedimentos, se hallan dentro de los niveles guías establecidos por la normativa respectiva vigente, destacándose el NO registro de metales pesados, Ni HC en los sedimentos, que constituyan afectación alguna para su disposición.
El objetivo fue evaluar el estado de los componentes ambientales que guardan relación con la obra, con antelación a su inicio, para establecer su seguimiento y control.
De este modo, la UT Pelque S.A-Lurovial S.A, es la empresa responsable de los monitoreos para los lotes 1 y 4; en tanto que la empresa C&E Construcciones S.A. es responsable de los monitoreos para los lotes 2 y 3. Los análisis fueron sobre los parámetros físicos y químicos (ph, conductividad, turbiedad, SDT, SST, sustancias fenólicas, oxígeno disuelto, hidrocarburos, fosforo, arsénico, nitrógeno total, nitrito, nitrato, DBO y DQO) incluyendo análisis de metales pesados (cobre, hierro, mercurio, níquel, cinc, cadmio, cromo total, plomo) e hidrocarburos aromáticos policíclicos para calidad de agua (PAHs) y polinucleares para sedimentos (PNAs).
Según Dec. 831/93 ley 24051 el monitoreo de los analitos de agua y sedimentos resultó NO DETECTABLE para componentes vinculados con la contaminación de suelos. Los resultados se reflejaron sin observaciones, las variables monitoreadas se hallan dentro de los márgenes establecidos por la Legislación Nacional Ley Nº 24051 Dec. 831/93. En cuanto al análisis cromatográfico, los resultados permiten concluir que los suelos NO tienen registro de presencia de metales o parámetros contaminantes.Preservación del patrimonio arqueológico, paleontológico y forestal
Con respecto al Programa de Preservación del patrimonio Arqueológico y Paleontológico, se llevaron a cabo relevamientos a lo largo de toda la traza, para determinar la sensibilidad patrimonial del áreas, enmarcadas en lo establecido por la Ley Nacional 25.743/03 de Protección del Patrimonio Arqueológico y Paleontológico, trabajos que realizaron profesionales avalados por la Dirección de Patrimonio provincial, siguiendo las normas estipuladas en el protocolo para obras que impliquen un potencial impacto sobre el patrimonio arqueológico y/o paleontológico en la provincia de Buenos Aires. Los resultados evidencian que los sedimentos presentes tienen una alta potencialidad arqueológica.
En el marco del Programa de Preservación Flora y Fauna, se efectuaron relevamientos cuyos resultados muestran un ambiente de ribera y adyacencias con un alto grado de antropización (transformaciones ejercidas por el ser humano en el medio), cuya cobertura arbórea se encuentra representada por bosques maduros de Acacia Negra (especie invasora) y bosques jóvenes, donde cohabitan otras especies exóticas.