El proyecto del COMIREC había sido presentado en agosto en el encuentro en Conagua.
El Comité de Cuenca del Río Reconquista (COMIREC) ha dado inicio a su proyecto de Relevamiento y Monitoreo Estacional de Humedales, una iniciativa presentada en agosto en el encuentro en Conagua. Este proyecto busca identificar, diagnosticar y dar seguimiento a las Áreas Vulnerables a Excesos Hídricos en la Cuenca Alta del Río Reconquista (AVEHCARR). La labor es crucial para una planificación ambiental más eficiente y para la mitigación de los impactos socioeconómicos causados por las inundaciones recurrentes en la región. El trabajo de campo es una corroboración del exhaustivo análisis previo de gabinete.
Esta tarea, crucial para la gestión del riesgo hídrico, se apoya en una metodología rigurosa que combina el análisis de imágenes satelitales (Sentinel-2 y Landsat 8) con la tecnología de drones. A través del análisis multitemporal de estas imágenes, se han detectado y delimitado áreas con persistente acumulación de agua. Los sectores identificados incluyen zonas de uso residencial informal y áreas de cría intensiva, lo que subraya la vulnerabilidad de distintos tipos de asentamientos y actividades económicas a los eventos hidrometeorológicos extremos.
La segunda fase del proyecto implica la validación en campo. Para ello, se han definido puntos de monitoreo específicos en las AVEHCARR. De manera estacional, se realizan vuelos con vehículos aéreos no tripulados (drones) equipados con cámaras RGB y sensores térmicos. Estos vuelos permiten obtener imágenes y videos de alta resolución que confirman la presencia de anegamientos temporales, evalúan la condición del terreno y detectan micro relieves. Esta tecnología permite a los técnicos validar y refinar con precisión la información obtenida a distancia.
La cuenca alta del Río Reconquista enfrenta una alta exposición a estos eventos extremos. La integración de la teledetección satelital con las observaciones aéreas de los drones es una herramienta que permite una caracterización detallada y precisa de las áreas vulnerables.
En conclusión, la combinación de estas fuentes de información geoespacial está fortaleciendo la base técnica para la toma de decisiones de ordenamiento y mitigación. Este proyecto es un modelo de tecnología aplicada para la gestión ambiental y la protección de las comunidades.